
Coordino
las labores de pintura de la Abadia y facilito la habitabilidad del Padre
Carlos. Gestiono las anotaciones de
agenda para intenciones de misas, avisos, y reuniones. Coordino la celebración de los entierros que
ha habido, así como la preparación de bautizos y otras celebraciones, como San
Francisco de Asis, la Virgen del Pilar, estas dos celebraciones con el uso del incienso, etc… Cada dia habría la Iglesia para las
celebraciones de la Palabra y de la Eucaristia, y daba razón a los fieles que
solicitaban aclaraciones o algún servicio.
Rezaba el Santo Rosario no solo de lunes a viernes, sino que introdujo también el rezarlo los sábados antes de la misa.
Rezaba el Santo Rosario no solo de lunes a viernes, sino que introdujo también el rezarlo los sábados antes de la misa.
Puntualmente
preparaba la celebración de la Eucaristia tanto en la Residencia como en la
Iglesia Parroquial, y ha estado al frente de la preparación de la Solemne
celebración con la que ha iniciado el ministerio pastoral el nuevo párroco
D.Lisardo.
Ha hecho las indicaciones al acólito Antonio, así como ayudando al Ministro de la Eucarístia José Antonio y al Padre Carlos.
Ha hecho las indicaciones al acólito Antonio, así como ayudando al Ministro de la Eucarístia José Antonio y al Padre Carlos.
Ha sido
un periodo intenso por tratarse de 21 días en ausencia del Párroco, pero todo
ha funcionado con normalidad y con puntualidad, signo claro de la larga
experiencia y del gran amor hacia la Parroquia que también en esta ocasión ha
sabido mostrar Felipe.
Son
muchas las felicitaciones y reconocimientos que le han hecho llegar a través
del Facebook y personalmente. Para todos
ha sido motivo de satisfacción comprobar una vez más su fervorosa dedicación a
todo lo que implica la vida de la Parroquia de Moixent. Y cuantos han necesitado acudir a la
parroquia han podido comprobar la competente y atenta atención de Felipe.
Ha sido una garantía para la vida eclesial contar con laicos como el preparados y dispuestos para colaborar en las tareas de la vida de la Iglesia, lo cual es también un signo de los tiempos: como bautizados, participes de la consagración sacerdotal de Jesucristo por medio del bautismo, estamos llamados ha colaborar en la vida de la Iglesia, como miembros vivos de la misma. Debe terminar ya ese tiempo y esa costumbre en que la Iglesia era cosa de los curas, pues no se ajusta a la verdad de nuestro bautismo, ni tampoco a las necesidades de nuestro tiempo.
Ha sido una garantía para la vida eclesial contar con laicos como el preparados y dispuestos para colaborar en las tareas de la vida de la Iglesia, lo cual es también un signo de los tiempos: como bautizados, participes de la consagración sacerdotal de Jesucristo por medio del bautismo, estamos llamados ha colaborar en la vida de la Iglesia, como miembros vivos de la misma. Debe terminar ya ese tiempo y esa costumbre en que la Iglesia era cosa de los curas, pues no se ajusta a la verdad de nuestro bautismo, ni tampoco a las necesidades de nuestro tiempo.
Pero
especiales, muy efusivas y muy numerosas han sido las felicitaciones de la gran
celebración de la misa de inicio pastoral del nuevo Párroco: Para todos resulto
una celebración espléndidamente preparada y bellamente ejecutada, para disfrute
de todos y para mayor gloria de Dios.
Acepto con sentido de responsabilidad la misión que se me confió y
felizmente la a llevado a cabo con la ayuda de Dios y para su mayor gloria. Enhorabuena.